VISITA 31 DE OCTUBRE

¡Hola a tod@s! Ayer, los doctores estuvimos de nuevo por la planta de pediatría del hospital de Ciudad Real, para visitar a los niñ@s allí ingresados. Como siempre, a las 5 comenzamos a pasar por las habitaciones, donde los niños y niñas ya esperaban impacientes. Para tristeza nuestra tuvimos bastante "público" (ya sabéis que somos los únicos artistas que más nos alegremos cuanto menos público tenemos), así que echamos mano de todos nuestras pócimas mágicas y cada paso por una habitación se convirtió en una bonita experiencia. Los niños, junto con sus familiares, llenaron el pasillo de pediatría de risas y la MÁGIA lo invadió todo, haciendo que por un momento el hospital fuese de todo menos un hospital, ya que ni los niños, ni sus familias, ni las enfermeras, ni las chicas de prácticas, ni las señoras de la limpieza, ni cualquiera que pase por el pasillo de la planta, se libra de la magia de los doctores. Marta (5 años), David (24 días), Clara ((19 meses), Valeria (1,5 meses), Eliana (2 años), Nil (6 meses), Aarón (2 años), Samuel (5 años), Jennifer (2 años), Francisco (5 años) y Jorge (1,5 meses). Todos jugamos, reímos y disfrutamos de lo lindo, hasta tal punto, que alguna de las familias, llamaron a familiares para que llevásen los niños allí. ¡¡¡Quién nos lo íba a decir: llamar a alguien para que lleve su niño al hospital!!! y es que estas tardes son MÁGICAS de verdad. Gracias a todos los niños y sus familias. Gracias también a Ana, cirujana del riñón (de uno sólamente por lo visto) por confiar en nosotros y descubrir así que la MAGIA existe. Compartir con vosotros un hecho maravilloso que nos pasó en una de las habitaciones, con un niño llamado Aarón: al pasar a la habitación donde estaba el niño y sus padres, Aarón, de 2 años, se asustó de los "doctores". Si nos quedábamos en la puerta, sólo nos miraba. Si nos acercábamos, comenzaba a hacer "pucheros" para llorar. Pues bien, a través del clown más puro, los doctores hicieron que los padres de Aaron empezaran a reir a carcajadas, lo que hizo que éste viese que estos "personajes de bata blanca" no eran malos, y poco a poco nos fue aceptando, hasta acabar jugando y riendo a carcajadas con nosotros. PURA MAGIA